La Huella del Carbón Vegetal.

Ing. Pablo Chávez Martínez.

Por Definición: Entiéndase por carbón vegetal, aquel material sólido, seco, ligero y muy combustible que se obtiene por la combustión incompleta de la leña.

1.- Región con posibilidades de producción de carbón vegetal en Nuevo León.

En los municipios que se localizan en el Noreste, porción central-este y parte del Sureste, región que abarca a 16 municipios desde Anáhuac, Vallecillo, Parás, pasando por Dr. Coss, Bravo, China y para terminar en Linares, existen las condiciones ideales para que se desarrolle el matorral espinoso en sus diferentes asociaciones. Es en esta región en donde crece el mezquite, ébanos, brasil, coma y otras especies de las denominadas comunes tropicales y es en esta región en donde es posible encontrar distintos aprovechamientos forestales maderables para la elaboración del carbón vegetal.

Sin embargo y excepcionalmente encontramos aprovechamientos forestales en los bosques templados de la Sierra Madre, en Iturbide, Galeana, Aramberri y Zaragoza en los que se emplea especialmente la madera de encino para la elaboración de carbón vegetal.

2.- De la autorización del aprovechamiento forestal maderable.

Derivado de la evaluación del Programa de Manejo Forestal para el aprovechamiento de Recursos Forestales Maderables, la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales, expide una Autorización para llevar a cabo el aprovechamiento forestal en un predio, autorización en que se contempla llevar a cabo la extracción de arbolado de especies comunes tropicales por espacio de uno a varios años. Dicha autorización otorga derechos y obligaciones a los titulares de las mismas.

3.- Ejecución del aprovechamiento autorizado

a) Contratación

Generalmente y no siendo esto una regla, los productores de carbón vegetal en el Estado de Nuevo León tienden a contratar, para el trabajo que implica la elaboración del carbón, a gente en los estados de San Luís Potosí, Zacatecas y Coahuila principalmente, por lo que eventualmente se desplazan hasta las comunidades para realizar la contratación. La razón de esto, es que, por una parte estas personas cuentan con experiencia, tienen grandes necesidades de empleo, se puede conciliar más fácil con ellos el salario, que a diferencia de la mano de obra en el Estado que se cotiza muy alto o bien no se encuentra para esta labor.

Una vez ubicados en el predio, los trabajadores habitan casi permanentemente en el campo de trabajo, en ocasiones con su familia completa; en tanto perdure la anualidad autorizada y exista volumen maderable por aprovechar, las únicas circunstancias que alejan a los trabajadores de  sus áreas de labor, son las enfermedades, fiestas patronales en sus pueblos de origen, la llegada de la Navidad o del mal tiempo que dificulta el aprovechamiento,  la elaboración del carbón o bien las maniobras de carga del producto elaborado.

b) Aprovechamiento

Todo aprovechamiento forestal autorizado, se debe dar en condiciones de sustentabilidad de los recursos naturales, para generar tal situación la SEMARNAT, autoriza de manera condicionada el aprovechamiento, por lo que éste inicialmente se dirige hacia los elementos arbóreos y/o arbustivos que se encuentren sobremaduros, enfermos, decrépitos o mal conformados, para llegar a un volumen ideal de extracción en el que no se comprometa la permanencia del matorral ni se atente contra el ecosistema.

4.- Elaboración

Existen tres maneras básicas para la elaboración del carbón vegetal.

En horno, que puede ser construido con ladrillo a nivel del suelo o bien de fierro anclado al suelo o movible; su uso no es muy generalizado en el estado, teniendo solo algunas experiencias en el predio San Lorenzo de China, N.L., más bien este tipo de hornos se utilizan en el centro del País para la madera de encino, el material resultante es de buena calidad ya que se controla bastante bien la humedad y oxigenación, obteniendo volúmenes variables dependiendo de las dimensiones del horno.

En pozo, de uso generalizado sobre todo en aquellos lugares en donde: La persona que lo elabora no cuenta con mucha experiencia, no tiene un predio propio para la extracción de madera por lo que se dedica a la recolecta de madera muerta o proveniente de desmonte. El carbón elaborado en estos pozos puede ser de mala calidad, toda vez que el material utilizado se encuentra muy seco y seccionado de manera irregular además de que no se mantiene en su elaboración las condiciones adecuadas de humedad, temperatura y de vigilancia. Se utiliza la tierra como medio para controlar los niveles de oxígeno en la combustión y para aislar la madera que se carboniza contra una pérdida excesiva de calor, es el sistema más antiguo de carbonizar y con seguridad se remonta al amanecer de la historia. Se puede llegar a producir en un pozo de 3 x 2 x 1.5 aproximadamente de 1.0 a 2.0 toneladas y se emplean para ello aproximadamente de 6 a 8 metros cúbicos de leña, con tiempo aproximado de “cocción” es de entre 3 a 5 días dependiendo la cantidad de leña a transformar.

En Chavete o bolón, de uso generalizado en el Estado y otras partes de la República, principalmente por aquellas personas que cuentan con gran experiencia, toda vez que este tipo de elaboración exige gran dedicación, conocimiento y cuidado, ello debido a que un gran chavete requiere de constante vigilancia día y noche por un periodo de entre 5 a 15 días, dependiendo ello de la cantidad de leña a transformar. El producto resultante, es de gran calidad en cuanto a densidad, consistencia, humedad y tamaño, por lo que en una buena horneada se puede llegar a producir hasta 10 toneladas, utilizando para ello entre 30 a 40 metros cúbicos de leña.

5.- Extracción del producto terminado

Una vez terminado el tiempo de “cocción” que varía dependiendo de la manera en que se elabora y la cantidad que se carga, que puede ser de 5 a 15 días, el trabajador tapa las entradas de oxigeno y con ello sofoca la combustión, generalmente y por la premura de la extracción se utiliza agua para bajar el calor del material y apagar cualquier indicio de fuego vivo ya que este al propagarse puede incendiar el carbón y causar la pérdida del producto. Posteriormente los troncos carbonizados se rompen en trozos más pequeños y se envasan en costales que generalmente pesan entre 20 y 26 kilos, esta tarea puede durar varios días.

6.- Comercialización del Carbón

La comercialización se realiza dependiendo de quién es el propietario de los bienes de capital, esto es si el que elabora el carbón es personal contratado, el patrón realiza un corte de producción contra gastos de manutención generando un pago al trabajador por cantidad de kilos elaborados; por otra parte cuando el que elabora el carbón es dueño del producto, es cuando inicia la comercialización, por lo que el comprador acude al predio y compra de manera directa el producto, en dicha transacción se expide un documento de carácter forestal (no fiscal) con el cual el vendedor transmite la propiedad de un producto forestal y el comprador ampara dicho producto para su transporte y arribo a un centro de almacenamiento de materias primas forestales “carbonería”

Una vez que el producto forestal llega a la carbonería, este se envasa, generalmente en bolsas de papel de un peso que varía entre los 3.5 kilos (la más convencional) hasta su presentación de 10 kilos. En este momento se puede dar ya la venta directa al consumidor final, sin embargo también estos centros son distribuidores a grandes cadenas comerciales y/o pequeñas tiendas de consumo.

Es necesario señalar que una gran parte del carbón vegetal (sin precisar qué cantidad) que se consume en el área metropolitana de Monterrey proviene de otros Estados principalmente de Tamaulipas y Coahuila, aunque existen antecedentes de carbón vegetal, que se comercializa en el Estado de Nuevo León, proveniente de Campeche, Quintana Roo, Veracruz y excepcionalmente de Sudamérica.

7.- Consumo

¿Quién? no ha disfrutado el delicioso sabor de una carne, pollo, puerco, pescado o cualquier otra cosa que se pueda cocinar en un asador; tradición muy arraigada en los estados del Norte del País y que ha ido creciendo en popularidad en el área metropolitana de Monterrey ya que se estima que el consumo mensual de carbón vegetal varia en esta zona entre las 3,000 y 5,500 toneladas (cifra calculada en estudio de campo realizado por la SEMANAT en 2003), esto entre lo que se consume en el hogar y en los establecimientos que expenden alimentos asados. Cifra que alcanza su máximo valor en la quincena de pago o bien cuando se realiza el “clásico regiomiontano” o alguna celebración especial o día de asueto.

Importante ahora es reconocer que Nuestro Estado es un gran consumidor de carbón vegetal y que este consumo no solo incide sobre la economía y recursos naturales del mismo, sino que traspasa fronteras, de la misma manera contribuye en la liberación de bióxido de carbono y consecuentemente al cambio climático.

8.- Perspectivas a futuro

Innegable es, que para que una tradición o costumbre bien arraigada pueda ser cambiada o modificada, debe ser o bien sustituida por otra o entrar en un proceso largo de modificación, en donde interviene el que la práctica, el que la fomenta, quien la publicita o quién la impone, razón de ello es pensar que la tradición o costumbre que se tiene en la región de hacer una reunión familiar en torno a un asador, no va a cambiar de la noche a la mañana y tampoco sería lo pretendido; sino más bien, por una parte asegurar que la producción del carbón vegetal se de en condiciones de sustentabilidad y por otro lado buscar un consumo responsable, adquiriendo solo producto que provenga de aprovechamientos y establecimientos autorizados, cambiando a tecnologías más eficientes, como asadores de gas o de estilo parabólico que concentran el poder calorífico del carbón.

Dentro del Plan de acción Climática para el estado de Nuevo León, se establecen una serie de acciones tendientes a la reducción de emisiones de gases de efecto invernadero, por lo que se puede conocer las mismas en la página electrónica del Gobierno del Estado y entender la manera de cómo cada uno de nosotros podemos contribuir en la mitigación y adaptación al cambio climático.